Exposición Nueva York antes del 11S

Fotografías de agosto de 2001 un mes antes de los atentados. La mayoría son paisajes con las Torres gemelas o desde ellas. Siguen la estela de la serie sobre Siria investigando la cualidad de cierto tipo de fotografía de ser un recuerdo de lo que ya no es más, un memento mori, como las fotos que se sacaban de los muertos en el siglo XIX que retrataban lo que estaba a punto de perderse, un cuerpo, la paz en el caso de Siria o una vista, una perspectiva y probablemente un espíritu en el caso de Nueva York. Esta cualidad viene dada desde el recuerdo. Sin ese recuerdo las fotos son otra cosa. Igual que esas fotos de difuntos no son lo mismo para los que conocieron al ser vivo, estas fotos no son lo mismo sin el recuerdo del 11S, o las de Siria sin saber que estan en plena guerra. El arte suele ser intemporal y utópico, esto es, no suele circunscribirse al lugar o al momento en que se realizaron, se salen de su contexto, de su cronos y su topos, para representar una generalidad o mejor universalidad, aunque sea este un concepto algo denostado en la crítica contemporánea. Por ejemplo, Quijote acaba representando al ser humano en busca de la perfección y no a un enjuto hidalgo loco del siglo XVII o el Guernika acaba siendo la imagen del horror de todas las guerras y no de un bombardeo concreto. Pero la fotografía (no sólo la fotografía pero especialmente entre otras disciplinas) muchas veces se nutre de la memoria. Son imágenes de lo pasado que no representan nada más que ser el recuerdo de lo que pasó y que nos llevan, o que acarretan con ellas un flujo de recuerdos de momentos y sensaciones. La magdalena de Proust que llevaba al personaje a la infancia, el álbum familiar cogiendo polvo en el estante que un buen día abrimos. Tal vez no es arte, pero es fotografía, foto-grafo, escritura con luz. Y la luz como el agua del río, nunca es la misma. Sólo se me ocurre acabar citando a Rutger Hauer en el final de Blade Runner. "He visto cosas que vosotros no creeríais... atacar naves en llamas más allá de Orión... he visto rayos C brillar en la oscuridad más allá de la puerta de Tannhäuser" (desde mi propia memoria más modesta y mediocre añadiría: he visto gentes tranquilas sufrir el horror de la guerra, he visto orgullosos rascacielos convertidos en polvo más allá del océano) "Todos esos momentos se perderán en el tiempo como lágrimas en la lluvia, es hora de morir". Mientras estemos vivos conservamos el recuerdo. ¿De qué nos sirve? No lo sé, al final se perderán, pero hay imágenes que nos avivan, nos recuperan aquel tiempo pasado que siempre fue mejor. Nueva York ya no es lo que era.
 
















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